Uno debiera llamar con está palabra todo aquello que al sacarlo de uno ocasiona un extraño consuelo, pero no, aquello se asemeja más a un dolor profundo. Pero que espera uno para dar el brinco?, un brinco que te lleve a disfrutar las decisiones, porque hace falta saber que sí uno toma una u otra decisión es para tener de cierto modo tranquilidad, entonces el dolor profundo y toda esa tristeza exasperante en realidad es esperanza. Esperanza desbordándose en forma de desahogo y no tanto por ahogarse quiere decir que de pronto tiene que existir el des.ahogo. Para esa esperanza disfrazada hace falta decidirse, pero de la decisión pasamos a algo mucho más complejo, corrijo; algo más complicado. Complicado por las acciones o posturas que uno tendría que tomar para salir de ese desasosiego y convertirlo en esperanza. Ahora necesito yo dar el brinco, eso de pasarme por completo a la esperanza.
Anoche he llorado a cantaros, hoy amanecí con los ojos a reventar, en casa me escuso diciendo que es la alergia, y quizá efectivamente se trate de una alergia de un estarse quieta e inquieta en la situación en la que estaba. Entonces me decido por llorar y estar muy muy mal, pero existen brincos que uno tiene que dar. Ahora sirve mirarse en el espejo, no soy fan de mirarse en ese “material” pero me miró, lo hago de perfil, de frente, cierro los ojos para no mirarme mas. Entonces los abro y ahí esta!! Sigo siendo yo y nada más, pero hay algo. Ese algo es ridículamente complejo, lo es para una mente como la mía, pero insito en mirar y entre ojos hinchados se esboza una sonrisa. Que cosa es esto? la esperanza de esos brincos?? El des.ahogo que se esta asomando???
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario